Opciones de tratamiento para tumores cerebrales

Los neurocirujanos usan herramientas especializadas para extirpar temporalmente parte del hueso del cráneo a fin de acceder a un tumor cerebral. Utilizamos las técnicas y tecnologías más recientes, como guía de imágenes estereotácticas en 3D, microscopios robóticos de alta potencia, imágenes fluorescentes, técnicas volumétricas en 3D y más, para que este procedimiento sea lo más seguro y eficaz posible. Estas técnicas de visualización avanzadas permiten a nuestros cirujanos utilizar incisiones más pequeñas durante la cirugía.  

Un sistema informático en el quirófano ayuda a nuestros neurocirujanos a lograr una precisión milimétrica. El sistema combina imágenes basadas en RM, así como otras imágenes funcionales e información de conectividad cerebral en un modelo 3D del cerebro del paciente. Nuestros neurocirujanos pueden usar este modelo, al igual que un mapa y un dispositivo GPS, para extirpar de manera segura la mayor cantidad de tumor posible y calcular vías seguras para llegar a tumores profundos que de otro modo se considerarían inoperables. 

Utilizamos cartografía cerebral funcional cuando se presentan tumores o afecciones neurológicas cerca de centros importantes de movimiento, sensoriales y del lenguaje del cerebro que son únicos en cada paciente. Nuestros neurocirujanos y su equipo de neurofisiólogos utilizan estimulación eléctrica para mapear de forma interactiva estas áreas funcionales durante la cirugía mientras el paciente está despierto y bajo el cuidado de un anestesiólogo especializado. Se extirpa la mayor cantidad posible del tumor y, a la vez, se controlan y conservan las funciones motoras y del habla.

Utilizando la guía de imágenes estereotácticas y una pequeña cámara de fibra óptica llamada endoscopio, los neurocirujanos pueden extirpar con seguridad tumores en lo profundo del cerebro, los ventrículos y la base del cráneo, incluida la glándula pituitaria. Lo hacen con gran precisión a través de pequeñas incisiones mínimamente invasivas o simplemente a través de la nariz. Un equipo de especialistas, que puede incluir un otorrinolaringólogo y un neurocirujano, generalmente realiza estos procedimientos en conjunto.

Nuestro equipo es uno de los pocos en New Jersey que aprovecha el poder de las imágenes fluorescentes, una tecnología innovadora. Después de beber una solución líquida, el tumor canceroso de un paciente brilla con un color rosa fluorescente. Con un microscopio y un filtro especiales, nuestros cirujanos pueden distinguir las células cancerosas del tejido cerebral sano para extirpar con precisión el tumor.

La cirugía abierta de la base del cráneo abierta se ha vuelto más segura y eficaz gracias a las técnicas quirúrgicas avanzadas que utilizan aumento de gran potencia. En esta cirugía, se extrae el hueso en la parte inferior del cráneo para acceder a los tumores difíciles de alcanzar. En algunos casos también se utilizan técnicas mínimamente invasivas y endoscopía. Un equipo multidisciplinario de especialistas planifica la cirugía y los tratamientos de seguimiento. Un equipo de neurofisiólogos ayuda durante el procedimiento para garantizar que se controlen y conserven las funciones críticas del cerebro y los nervios delicados.

Una alternativa quirúrgica mínimamente invasiva a la craneotomía abierta. La TTIL puede beneficiar a los pacientes con tumores cerebrales, necrosis por radiación o epilepsia focal refractaria. Mientras el paciente está anestesiado, el cirujano abre un pequeño orificio en el cráneo. Mediante resonancia magnética y guía robótica, el cirujano hace pasar un cable de fibra óptica a través del tumor. Una vez colocado el cable de fibra óptica, se usa un láser para destruir térmicamente el tumor o crear una lesión. El procedimiento se completa en la sala de resonancia magnética, donde se visualiza el daño térmico del tumor en tiempo real. A continuación, el cirujano retira el cable y cierra la incisión.

Mediante un procedimiento de embolización mínimamente invasivo, nuestros neurocirujanos endovasculares pueden detener el flujo sanguíneo a un tumor como preparación para la cirugía. Esto hace que el tumor se encoja, facilita la extirpación y reduce el riesgo de hemorragia y daño nervioso durante la cirugía.

Nuestros neurooncólogos, expertos tanto en neurología como en oncología, se especializan en el tratamiento de cánceres que comienzan en el cerebro y el sistema nervioso central, o que se propagan allí. Con una sólida cartera de estudios clínicos e investigación, brindan atención y tratamiento extraordinarios de tumores cerebrales para las complicaciones neurológicas del cáncer. Trabajamos en estrecha colaboración con el oncólogo de cada paciente para maximizar la calidad de vida. Esto incluye ayudar a controlar los dolores de cabeza, los accidentes cerebrovasculares, las convulsiones y los problemas nerviosos (neuropatía periférica) que pueden ser consecuencia de la quimioterapia o del cáncer mismo.

Cada año, se proponen nuevos tratamientos para los tumores cerebrales, como medicamentos dirigidos a una mutación específica que se encuentra en un subconjunto de tumores. Usamos el perfil molecular del tumor cerebral de cada paciente, un mapa único de todas las mutaciones dentro del tumor cerebral, como guía para determinar qué terapia potencial de vanguardia puede ser eficaz. Estos perfiles también impulsan nuestra comprensión del comportamiento y el tratamiento de los tumores, nos ayudan a identificar mutaciones que aún no tienen tratamientos y aportan información para estudios futuros y el desarrollo de nuevos medicamentos. 

La inmunoterapia utiliza el propio sistema inmunitario del cuerpo para combatir las células cancerosas como si fueran una infección. Habiendo ya mostrado resultados impactantes en otros tipos de cáncer, el uso de inmunoterapias en el tratamiento de tumores cerebrales está creciendo. Nuestro equipo ofrece tratamientos de inmunoterapia a nuestros pacientes y explora formas de aprovechar aún más esta tecnología.

La terapia de campo de tumores (TTFields) utiliza campos electromagnéticos alternos para interrumpir la división de células cancerosas. Estos campos se administran a través de ultrasonidos y actúan de forma regional y no invasiva para inhibir el crecimiento de los tumores. La terapia TTFields está aprobada por la Administración de Drogas y Alimentos de U.S. para el tratamiento del glioblastoma multiforme, el cáncer de cerebro más común y agresivo. Los estudios demuestran una mejora en la supervivencia general cuando se agrega a las terapias estándar.

Nuevos avances están abriendo la puerta a novedosos tratamientos de quimioterapia. Estos incluyen el uso de información molecular sobre los tumores de pacientes individuales para determinar el mejor régimen de quimioterapia, nuevos medicamentos que impiden el crecimiento de células cancerosas resistentes, nuevas combinaciones de terapias e inmunoterapia que estimula el propio sistema inmunológico del paciente para atacar selectivamente las células cancerosas.

Más información sobre la quimioterapia

Este tipo de radioterapia utiliza escaneos de imágenes para administrar con precisión haces de radiación de alta energía a un área específica del cerebro o la base del cráneo. Con la ayuda de nuestros físicos y oncólogos radioterapéuticos, se realizan exploraciones por imágenes antes de cada tratamiento y se controla la posición del paciente durante todo el tratamiento de radiación.

Más información sobre oncología radioterapéutica

Nuestro sólido programa de investigación de estudios clínicos ofrece tratamientos innovadores y terapias nuevas a nuestros pacientes, desde lo último en inmunoterapia y quimioterapia hasta tratamientos guiados por la genética.

Más información sobre los estudios clínicos sobre tumores cerebrales